Valoraciones Personales

Finalizo (bueno, pongo un punto y coma) la sección de Escuela Viva con mi valoración personal de la Escuela Libre Paideaia, y sobre como fueron mis prácticas allí.


Mis prácticas en el Paideia fueron muy enriquecedoras, ya que es una Escuela en la que hay otro tipo de enseñanza, y en la que los mismos niños son los que regulan sus propios conflictos.

Además el trato dispensado por parte de los demás educadores ha sido excelente, mostrando un gran compañerismo que me ha sorprendido.

El hecho de que sean los niños los que regulan sus propios conflictos (casi no hay conflictividad escolar), de que no haya absentismo, de que no hayan actividades extraescolares (para no beneficiar a unos niños de otros), de que no haya AMPA, o de que no haya campañas ni charlas de ningún tipo han limitado muchísimo mis prácticas. Es decir, el educador social ve limitada sus funciones.

Desde el primer día me dejaron claro que mis prácticas se reducían a la “observación”, dejándome una gran libertad para elegir lo que quisiera hacer (aunque no tuviera mucha elección, ya que mis prácticas se han limitado a colaborar con los niños en los trabajos colectivos y a observar en los talleres). Por todo esto, me he sentido que estaba haciendo unas prácticas de magisterio, más que de Educación Social.

Desde mi punto de vista, esta escuela libre anarquista, merece la oportunidad de ser conocida, debido a que sus planteamientos son fantásticos.

Además, en una ciudad como Mérida, capital de Extremadura, está muy bien que esté implantada una escuela de estas características, siendo una de las pocas ciudades españolas que cuentan con ellas.